La poesía pudo más que la confianza en el fin del mundo. Antes ya lo había dicho René Char. Un verano tumultuoso corría entre nuestras venas o moraba oculto en este paisaje de lluvia. Juntamos a nuestras familias y conforme terminaba el día 21 de diciembre del 2012 nos dábamos cuenta que sólo la luz cambiaría sus dudas por la soledad de los venados del bosque de Ranhuailla. Hinostroza le daría otro final a su novela y Herrera escribiría unos versos de pie forzado. Aquella noche hablamos a la intemperie de la inclemencia de la poesía peruana plagada de gestos y famas vanos. Pero el sábado llegó pisando la tenue belleza de la luz del día. Y un nuevo siglo comenzaba benigno y saludable. Fuímonos como sucede en la leyenda sin ideal ni esperanza. Nos prepararíamos para el siguiente fin del mundo de no se sabe cuándo.
Fotografías de Marina Herrera.
1 comentario:
Lo poesía ES el fin del mundo.
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