viernes, 3 de octubre de 2014

TRILCE NUEVAMENTE CON PEDRO GRANADOS.

Vallejo para Granados y Granados  para el contrapunto y la marinera.  Dos poetas bajo el mismo signo zodiacal jugando a las escondidas. Pero Granados nos ayuda a hundirnos en la solaridad  del vate de Santiago de Chuco, si cabe, y también a caer de pie en una fonda de ritmo y sabor insospechada para quienes habíamos hecho una lectura circunspecta de nuestro poeta universal. Granados descubre el juego y las canicas, con pelos y señales como académico que es, aunque adolezca de cierto gamberrismo. Es el muchacho que toca el timbre de la puerta y corre para encontrarse con algo menos que Dios: esa nada que ríe en el dintel  de la época epocal misérrima del tiempo de nuestros padres en Poesía y en Rumba.  V.H.       

domingo, 28 de septiembre de 2014

URCOS PLAZACHAPI 1.



Este es el mundo que nuestro querido paisano y marqués Vargas Llosa pretende que no existe. Y no sólo en su Utopía Arcaica sino en todos los márgenes de su obra. Esta muestra no es de hace cuarenta años, sino de hace algunos domingos. Es la prueba de que la vida cotidiana en las alturas del Perú perdura en la ropa de estas mujeres hecha con sus propias manos: hilada y tejida con lanas de alpaca y oveja que ellas también crían. Entonces, ¿alguien se equivocó en el camino que trae de Damasco a Urcos? O alguien teme que su obra sea fecundada por el olvido y more en el limbo del nunca jamás? ¿Quién es alguien? V.H.